miércoles, 26 de marzo de 2008

CONTENEDORES DE RECICLAJE - Cómo usarlos correctamente.



EL CONTENEDOR VERDE : vidrio



  • VIDRIO
  • Botellas de vidrio de cualquier color
  • Tarros de vidrio
  • Frascos de conservas
  • Tarros de cosmética y perfumería

NO
  • CRISTAL
  • Lunas de automóviles
  • Bombillas
  • Espejos
  • Cristales de ventana
  • Tubos fluorescentes

Éstos deben depositarse en los Puntos Limpios o Centros de Recogida y Reciclaje
Recomendación: Retire las tapas de los envases de vidrio antes de llevarlos al contenedor.
Solicite información en su ayuntamiento.



EL CONTENEDOR AZUL : papel y cartón




  • Periódicos y revistas
  • Propaganda
  • Cajas pequeñas de cartón (galletas, detergente)
  • Envases de cartón para huevos
  • Bolsas de papel

NO
  • Briks
  • Pañales
  • Papeles sucios o papeles encerados, metalizados o plastificados

Recomendación: Pliegue los cartones antes de introducirlos en el contenedor. No deje cajas fuera del contenedor.



EL CONTENEDOR AMARILLO : envases



  • Briks de leche, nata, batidos, zumos, vino, caldo...
  • Envases de plástico para alimentación
  • Envases metálicos
  • Botes de bebidas (cerveza, refrescos)
  • Latas de conservas (vegetales, cárnicas, de pescado, comida para animales domésticos…)
  • Platos y bandejas de aluminio (p. ej., los de comidas preparadas)
  • Chapas y latas de metal
  • Botellas (agua, refrescos, leche, zumo, aceite comestible, vinagre, salsas…)
  • Envases de productos lácteos (yogures, flan y otros postres lácteos, queso, mantequilla, margarina…)
  • Bandejas y cajas de "corcho blanco" (las de la fruta, verduras, carne, pollo y pescado envasados, y las que vienen con algunos tipos de helados); hueveras de plástico; vasos, platos y cubiertos de plástico desechables; tapas y tapones de plástico, etc.
  • Envases de plástico para productos de aseo y limpieza
  • Aerosoles (desodorante, laca, limpiadores de cocina, abrillantadores de la madera…)
  • Botes de plástico de productos de aseo (champú, cremas, desodorante, pasta dentífrica, gel de baño, jabón líquido…)
  • Botes de plástico de productos de limpieza (limpiadores domésticos, lejía, amoniaco, suavizante, detergentes líquidos y en polvo, sprays de limpieza…)
  • Bolsas y recipientes de aluminio para alimentos (alimentos infantiles, sopas, purés, pastas precocinadas, café, aperitivos, frutos secos, patatas fritas, bandejas para comidas preparadas, de leche, congelados, frutas, verduras, pan de molde, bollería, pasta, legumbres, cereales…...)
  • Bolsas que entregan las tiendas, supermercados, lavanderías, etc. para transportar los productos adquiridos…)
  • Envases de productos de charcutería (embutidos, jamón, bacón, queso…)
  • Envoltorios de plástico (el film transparente que acompaña a las bandejas de carnes, frutas, verduras y pescado; el que envuelve a muchas revistas, fascículos, prensa…; el que se emplea para proteger cajas de cartón y plástico, etc.…)
  • Film de polietileno transparente o de aluminio (el que se compra en bobinas y se emplea en casa para envolver alimentos frescos)
  • El plástico y el aluminio de los envases tipo blíster (son los envases donde vienen las pilas o los de las cajitas de cuchillas de afeitar, etc.)

Recomendación: Limpie los envases y aplástelos para reducir su volumen antes de tirarlos al contenedor.




NO

  • Materia orgánica
  • Envases de vidrio
  • Papel y cartón
  • Juguetes
  • Electrodomésticos
  • Biberones
  • Guantes de goma
  • Utensilios de cocina
  • Cajas de fruta
  • Cubos de plástico
  • Pilas

* Fuente: Ayuntamiento de Madrid. Área de medio ambiente.
por Cristina Benito / Infoecología

Pegatinas



Razones para reciclar

A falta de pan buenos son los datos reales:

  1. El costo de recogida y eliminación de una tonelada de basura es de entre 120 y 46€ en España.
  2. En España se tiran al año más de 300.000 toneladas de metales. Esto es un despilfarro de material.
  3. Si se recicla el vidrio se ahorra un 90% de energía y por cada tonelada reciclada se ahorran 1,2 toneladas de materias primas.
  4. Recuperar dos toneladas de plástico equivale a ahorrar una tonelada de petróleo.
  5. Por cada tonelada de aluminio tirada al vertedero hay que extraer cuatro toneladas de bauxita (que es el mineral del que se obtiene). Durante la fabricación se producen dos toneladas de residuos muy contaminantes y difíciles de eliminar.
  6. Al reciclar una tonelada de papel se salvan 17 árboles.

Es evidente que para que se produzca un buen reciclaje, la sociedad debe intervenir en el proceso de clasificación de basuras, este tema es poco debatido públicamente tanto desde el punto de vista jurídico como técnico, considerando que la clasificación doméstica ha de ser un derecho, nunca una obligación; que es uno de los eslabones que dificultan el máximo ejecicio del buen reciclaje.

Considerando que parte de nuestras basuras, contenedores y residuos en general, el contribuyente paga un buen dinero para su recogida común, es abusivo presionar a éste a que contribuya además con un servicio extra, y gratis, como es la clasificación y catalogación de sus basuras (muchas de ellas de dudosa clasificación). Este es el principal hándicap en el reciclaje.

Por lo que unas de las mejores condiciones que mejoraría el reciclaje, sería un incentivo, rebajando en general, el precio del recibo urbano de recogida de basuras; un buen gesto, sin duda por parte de las Administraciones locales, pero que tiene su justificación, ya que parte de esta rebaja se compensaría con la cantidad que reciben directamente de las industrias de reciclamiento.

Nunca hay que perder de vista, que la clasificación y catalogación de basuras por parte del contribuyente, es un servicio gratis que se realiza sin recibir ninguna contraprestación directa; además de considerar que la Administración Local recibe una contribución por otra parte; de este modo se evitaría que siempre paguemos más, lo de siempre, el ciudadano.



Fuente: Wikipedia

Andando se hace camino





Vivimos en una sociedad urbana en la que el ciudadano se convierte en algo más que el espectador, y todo ello gracias a la sobredosis de información. Vamos a aprovecharnos pues de ello, convirtámonos desde hoy mismo en el denunciante, en el reportero que capta con su cámara digital incorporada en el teléfono móvil aquello que merece ser contado.
Día a día, centenares de blogs recogen pedacitos de vidas anónimas, millones de preguntas y por qué no, millones de denuncias. Dicen las malas lenguas que en España se practica libremente la cultura de la queja, así pues, sin que sirva de precedente, esta puede ser constructiva, aunque las fotografías que mostremos en nuestras denuncias "bloggeras" no siempre lo van a ser tanto.

Un día cualquiera, entrada la tarde, hacemos uso de nuestra conciencia humana solidaria con el medio ambiente y nos dirigimos hacia los contenedores de reciclaje de basura habilitados por el ayuntamiento. Lamentablemente no todos los ciudadanos están dotados de tal conciencia del reciclaje, así que nos toca lidiar de manera quijotesca con montañas de cajas de cartón sin plegar que obstruyen esos maravillosos contenedores soterrados. Por si fuera poco hay quien, además de obturar los contenedores o que al encontrárselos atascados, concluye su hazaña dejando sus bolsas de basura y demás desperdicios a modo de adorno alrededor del contenedor, como bien muestra la fotografía. Pero hay más, hay algo aún peor que dejar los deshechos en forma de ofrenda a la basura urbana, lo peor son los ciudadanos que arrojan cualquier tipo de basura en el primer contenedor que ven, sea cual sea su finalidad en la cadena de reciclaje, vidrios en el contenedor de papel, papel en los de plástico o las baterías tiradas al contenedor de vidrio, ya hay que tener ganas de fastidiar, porque no es posible explicar que se realicen tales descuidos ecológicos.



Hablemos claro, cada día se producen cientos de miles de delitos ecológicos, cambios que afectan a la naturaleza y aceleran la deforestación, la sequía, el agotamiento de los recursos energéticos ... ¿descuido o mala leche? Ya es triste pensar en lo segundo, pero todo apunta a que los ciudadanos cada vez somos más irrespetuosos con esa naturaleza indispensable para el ser humano, no sólo nos estamos perjudicando a nosotros mismos, sino a generaciones venideras.

En el mundo actual, el nivel de desarrollo de un país se mide por la cantidad de residuos que produce. Pero no es menos cierto que su grado de cultura y desarrollo cívico es función del nivel de reciclado de estos residuos que genera.

Hay quien piensa que el reciclaje es un invento comercial para mantener a la sociedad de consumo ocupada, entregada a la vorágine del quiero más y lo quiero ahora pero como me sobra tanto lo tiro, pero como lo reciclo mi conciencia está limpia y puedo seguir consumiendo, por no mencionar a quien jura solemnemente que ha leído o visto en la televisión que eso de reciclar es tontería porque al final acaba todo en el mismo vertedero.

La culpa de todo (y estoy bromeando) la tiene Michael Moore
por objetar en su libro Estúpido Hombre Blanco que
los desperdicios previamente separados por los ciudadanos acababan reuniéndose con la basura tradicional en diversos puntos de EEUU, simplemente por el escaso interés estatal por el reciclaje. Dicho interés se centraría exclusivamente en la limpieza de conciencia ciudadana, que, satisfecha, se dedica a separar su basura y depositarla en bonitos contenedores de colores, dispuesta a seguir consumiendo sin parar. Tal afirmación rezuma demagogia ya que si bien el reciclaje no acaba con todos los males producidos por la contaminación, éste es indispensable, importantísimo para la conservación de la naturaleza, a día de hoy sólo tenemos un mundo y tenemos que vivir en él.

Reciclar (correctamente) es aprender a vivir, se ahorra dinero y se gana salud. Hay que ser persistentes, reeducar al ciudadano, criticar el abuso y la generación masiva de basura, consiste en ser conscientes de que los recursos del planeta son limitados.

Así pues, no queda otra opción, bueno, quedan muchas, pero nos hemos decantado por ésta, que no es otra que la de convertirnos en denunciantes y criticar esos atentados ecológicos de menor grado para algunos e intentar hacer de nuestras ciudades lugares más apaciblemente higienizados en comunión con el medio ambiente.

No hay más que decir.